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Firmado: Picpus
Signé Picpus
Simenon Georges, 1944
¿Qué hace un Comisario cuando recibe la advertencia de un posible asesinato de una vidente con día y hora expresamente aclarados, pero sin un nombre?
Claro que en principio podría tratarse solo de una broma ya que el portador del mensaje es un desfalcador de muy poca monta que ha jugado dinero de sus patrones y lo ha perdido, pero encuentra el mensaje y lo deriva a la policía. ¿Creerle o no? Por las dudas Maigret ordena una discreta vigilancia a las más de 180 adivinas registradas por si el tal "Picpus" firmante del anuncio es real y decide atacar, a conciencia del ridículo al que se expondría si resultare toda una broma.
Pero Picpus no solo existe, sino que asesina y abre la puerta del infierno.
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