

Tommy y Tuppence Beresford
Tommy Beresford y Prudence Cowley son dos muy jóvenes muchachos que se encuentran luego de haber prestado servicios para la Corona Británica tras la I guerra mundial.
Él de aspecto macizo, pelirrojo como una zanahoria, de mediana estatura y ella, apodada Tuppence, una menuda señorita de cabellos y ojos negros, ambos ahora desocupados.
Son de buena familia y sin apremios económicos, pero prefieren resolver por las suyas su propia situación sin recurrir a sus allegados por ayuda
Tras su encuentro, imaginan que podrían trabajar de lo que sea por encargo a cambio de algún dinero para ir pasando los días y de paso también divertirse. Son aficionados, inocentes, muy listos y también intrépidos y audaces.
Casi sin querer se encuentran trabajando para el Departamento secreto británico transformándose lo que pretendía ser nada más que diversión en una trepidante carrera para descubrir a un inhallable espía llamado «Sr. Brown» cuyo éxito, no sin importantes riesgos, les significó a ambos la entrada triunfal a esta actividad tan selecta. Ahora además se han declarado eterno amor y han decidido contraer matrimonio. Entre otras decisiones importantes, han incorporado a sus tareas tanto profesionales como domésticas a un joven Albert Batt, un muchacho todoterreno que fue sin lugar a dudas la mejor elección que pudieron realizar, puesto que les acompañaría fielmente a todos los sitios ocupando todos los roles que le pidieron.
Albert, que era botones de un hotel, se unió a los jóvenes Beresford y compartió sus aventuras. Después entró a su servicio y fue la única ayuda doméstica que tuvo la pareja. Luego de contraer matrimonio, Albert Batt era el orgulloso propietario de una taberna llamada «El pato y el perro», en el sur de Londres... pero abandonarlos, jamás.
Retornando a Tommy y Tuppence, son geniales las pullas entre ellos por un espacio al mérito, puesto que con distintas características llegan siempre al éxito, apoyándose uno en las ideas del otro y a veces salvándose mutuamente el pellejo. Hay que destacar que el "arte de meter la nariz" incluso cuando no le concierne o no la llaman, es mérito total de Tuppence y es precisamente gracias a esta cualidad y adicción que algunos casos se abrieron y otros llegaron al éxito aun cuando ya eran bastante mayores.
Luego de la primera misión llegan otras, una de las cuales les impuso cambiar su apellido para atender una impostada agencia de detectives llamada Blunt a fin de dar caza a un plan subversivo digitado desde Europa del este.
Los años pasan y esta pareja se ha hecho de fama a pesar de su acérrima discreción, así que les siguen llegando casos para resolver y otros que sencillamente los encuentran.
Agatha Christie también utiliza a estas historias para dar crédito a otros autores y famosos personajes detectivescos tales como Thorniey Colton, padre Brown, Sherlock Holmes, Thorndyke, McCarty, Polly Burton, inspector French, Roger Sheringham y otros tantos puesto que tanto Tommy como Tuppence les imitan para imbuirse de la mística y el oficio que caracterizó a estos personajes y también digámoslo, para divertirse ya que la base de todo el teatro que armaron es la diversión.
Para el final de la tercera entrega, Tommy y Tuppence son ya algo mayores, con dos hijos que también trabajan para el gobierno mientras siguen siendo requeridos sus servicios para estratégicas investigaciones.
Decide entonces Agatha Christie dar por finalizada la saga pero no contaba con el insistente reclamo de los fans de estos personajes, así que en 1968 tras veintisiete años de abandono, relanza las andanzas de esta pareja, ahora tras las sospechas de Tuppence, sin ningún encargo oficial que termina por dar con una red de extrema significación para los intereses del Estado, mientras sigue aumentando la fama y prestigio de estos dos.
Son abuelos con más de setenta años, deciden retirarse pero el destino habrá de jugarles otra pasada beneficiando también estos hechos al gobierno británico.
Al final terminan rodeados de sus afectos incluso de su fiel perro Hannibal.
Una pareja muy especial, muy enamorados y pendientes uno del otro y tremendamente eficaces en su trabajo, quizás porque nunca dejó de ser un juego para divertirse...
Así sería siempre… «Una aventura común…».
Todas sus historias incluyen finísimo humor y escenas de romántica tirantez y tensión con el lujo que puede dar la pluma de la magnífica Agatha Christie.
Serie
El misterioso señor Brown (The Secret Adversary, 1922)
Matrimonio de sabuesos (Partners in crime, 1929)
El misterio de Sans-Souci (N. or M.?, 1941)
El cuadro (By the pricking of my thumbs, 1968)
La puerta del destino (Postern of fate, 1973)
SINOPSIS
EL MISTERIOSO SEÑOR BROWN
La búsqueda de unos comprometedores documentos secretos suscritos durante la Primera Guerra Mundial y perdidos en el naufragio del Lusitania, da lugar a una lucha sin cuartel entre los servicios secretos británicos y una banda internacional que quiere utilizar los documentos como instrumento de la propaganda bolchevique. Pero en la vorágine de la guerra de espías aparecen dos jóvenes, Tommy y Tuppence, dispuestos a jugarse la vida para desvelar la identidad del líder de la banda, el misterioso Sr. Brown.
MATRIMONIO DE SABUESOS
Cuando el amable Tommy Beresford, queda desempleado y sin perspectivas de futuro al finalizar la Primera Guerra Mundial, se percata que la vida no es como él imaginaba. No obstante, al reencontrar una vieja amiga de infancia, Prudence Cowley, más conocida como Tommy y Tuppence Beresford, su vida cobra un interés inimaginado. Ambos sin dinero y sin trabajo deciden fundar la Young Adventures Limited, colocando un anuncio en el The Times, donde Tommy y Tuppence prometen: «… hacemos de todo, vamos a cualquier parte…».
Claro que este irresistible dúo está apasionado por la intriga… y uno por el otro. No pierden la oportunidad de comprar y gerenciar la Agencia Internacional de Detectives Blunt. Juntos, resolverán una serie de casos de una forma que ilustra con algo de humor y en gran estilo la manera de actuar de los mayores detectives del mundo.
Tommy y Tuppence se divierten hasta más no poder, mientras intentan resolver los casos más siniestros y mortíferos. En la lista de personajes envueltos en la acción se encuentra una bella actriz, un explorador del Ártico, un embajador americano y mucho más. Cada aventura guía a los recién casados tras la pista de joyas desaparecidas, documentos secretos, chocolates envenenados y otros. Lo más difícil en su tarea es descifrar quién es inocente y qué es legítimo.
EL MISTERIO DE SANS-SOUCI
Durante la Segunda Guerra Mundial, y mientras la R. A. F. lucha por mantener a la Luftwaffe lejos de sus costas, Gran Bretaña afronta una amenaza aún más siniestra del «enemigo interior»: espías nazis haciéndose pasar por ciudadanos corrientes. Con la presión en aumento, el servicio secreto decide contratar a dos espías muy particulares: Tommy y Tuppence Beresford. Su misión: buscar a dos traidores pertenecientes a las altas esferas, un hombre y una mujer, entre los variopintos huéspedes del hotel Sans Souci, en la costa inglesa. Pero esta misión no es precisamente un paseo, sobre todo teniendo en cuenta que los espías que buscan ya han matado al mejor agente británico.
EL CUADRO
Tommy y Tuppence Beresford visitan a su tía Ada en la residencia de ancianos en la que vive. Allí conocen a algunas ancianas que dicen que las están envenenando o que hay escondido el cadáver de un niño. Al poco tiempo fallece la tía Ada y ellos recogen sus pertenencias, incluyendo un cuadro que otra de las ancianas regaló a su tía. En él se ve una casa que Tuppence ha visto desde el tren, así que no descansa hasta encontrarla.
LA PUERTA DEL DESTINO
El matrimonio Beresford, Tommy y Tuppence Beresford, compra una antigua casa en una ciudad costera y cuando las necesarias reformas están listas, deciden mudarse.
La compra de la casa incluía un ático lleno de viejos libros que Tuppence, amante de la lectura, decide organizar. Los libros la hacen recordar su pasado y ella, con mucho placer, relee algunos fragmentos de obras que siempre admiró. Al hacerlo, encuentra un mensaje compuesto por algunas palabras subrayadas con rojo en la página del libro: «Marie Jordan no murió de muerte natural. Fue uno de nosotros».
Tuppence comienza a investigar el pasado de la casa y de la ciudad, contando con la memoria de los ancianos en los asilos y de las señoras de avanzada edad, además, creen que es su gruñona tía quien inventa las diversas calamidades que suceden en su vieja residencia de ancianos.
Pero no sólo en esta vieja casa encontrarán pistas inquietantes, también en la que acaban de comprar.
Es un trabajo arduo investigar sobre hechos que tuvieron lugar 50 años antes, pero Tuppence, con el apoyo de su marido Tommy, consigue descubrir quién era Marie Jordan, por qué fue asesinada y por quién.
Como no puede dejar de ser en una novela con Tommy y Tuppence, la solución del caso está relacionada con espionaje.
Las imágenes de los personajes son tomadas de «Agatha Christie's Partners in Crime», serie emitida por la BBC desde el año 2015